El salón de actos no es solo una sala polivalente, sino que como pieza central de un centro educativo también juega un papel representativo. Por eso, la iluminación debe crear un ambiente acogedor y generar la atmósfera adecuada para la celebración de todo tipo de actos, desde representaciones teatrales hasta ceremonias de graduación. Debido a que los salones de actos, los vestíbulos y las zonas de entrada se someten a usos tan distintos, es necesario realizar un proyecto de iluminación profesional. La iluminación general óptima se obtiene con una luz relativamente homogénea de 200 lux y una uniformidad de 0,4. Lo prioritario es ofrecer seguridad y una orientación adecuada. Para una buena distribución visual de un gran espacio conviene controlar la luz de cada zona por separado. Esto permite, por ejemplo, iluminar bien el escenario a la vez que se oscurece el patio de butacas.
Sobretodo en salas de gran tamaño, los sensores inteligentes ahorran energía de un modo duradero: los sensores de luminosidad captan la luz natural incidente y solo activan la luz artificial en caso de ser necesario. Una gestión de iluminación flexible ofrece además la posibilidad de zonificar y acentuar áreas distintas de la sala, por ejemplo, creando acentos precisos con apliques de pared. Escenas luminosas y temperaturas de color variables posibilitan la creación de escenarios de iluminación adecuados para cada ocasión y ambientes lumínicos interesantes. También la iluminación de emergencia y seguridad tiene un papel importante en la planificación luminosa de salones de actos y vestíbulos: en caso de necesidad, los sistemas independientes de iluminación o luminarias con función de emergencia garantizan una orientación inmediata, y los elementos de direccionamiento muestran el camino hacia el exterior.