La idea de Sonnenschutz Rainer era mostrar a sus clientes un cielo artificial en la sala de exposición del nuevo edificio de la empresa. La simulación de la luz natural es algo muy importante a la hora de comprar un toldo. Para la elección del color, es de gran ayuda observar el toldo bajo la luz del sol. «Quien quiera ‘construir el cielo’ no debe tener límites en su mente, ya se trate de un arquitecto o de un promotor de obra». Este es el enfoque seguido por el arquitecto-diseñador Stefan Punz.
Una estructura especial compuesta de 90.000 puntos luminosos led permitió lograr lo que parecía imposible: la construcción de un cielo artificial. Se trata de una solución específica para el cliente que satisface todos los requisitos, tanto en materia de generación de calor como de instalación de los alimentadores y de iluminación uniforme. Con sistemas de perfiles adicionales es posible además incorporar focos e iluminación de emergencia. Ahora, los toldos pueden exhibirse óptimamente en una superficie de 198 m2.
Los puestos de trabajo en la oficina requerían también la facilitación de una atmósfera apropiada. En concreto, en lugar de una cubierta de yeso debía utilizarse un techo de madera que aportara calidez. En él pudo integrarse una luminaria de plafón HEX-O cortada a medida. Esta serie de atractivas lámparas modulares ofreció a los diseñadores la máxima libertad creativa a la hora de planificar la iluminación de los puestos de trabajo. Una variante suspendida de dicha serie se utiliza también por encima del bar a modo de herramienta de diseño hexagonal.
Stefan Punz, Sonos Architektur ZT GmbH
La luz debe llevar adelante o reforzar la idea del diseño, por eso siempre dejamos que aparezca de forma diferente: a veces como una "hoguera" que se concentra en la mesa o como un "cielo" que simula la luz del día sobre un toldo expositor. A veces lo colocamos en primer plano como elemento de diseño y a menudo puede ocultarse a la vista. Las personas deben ser siempre las protagonistas y la luz debe responder a ellas y a su entorno. Sólo la luz puede hacerlo, por eso es una parte esencial de nuestra planificación arquitectónica.